miércoles, 4 de enero de 2012

CARTA REAL

Hoy tengo una mano que me sujete fuerte, una voz que me recuerde los auténticos sabores de los primeros días, alguien que encienda la luz cuando caiga la noche. Hoy no voy a dejar que la frente caiga sin luchar contra la gravedad, que la barquita quede varada por falta de aliento, que el miedo continúe paralizando el salto al vacío. Hoy va a ser un día incendiario de papeles quemados, de revueltas en el corazón, de promesas por demostrar ante los ojos de los pacientes.
Hoy vuelvo a casa esperando encontrarte dentro, vuelvo para quedarme, vuelvo por las palabras de la pequeña persona que habita en ti.
Hoy quiero gritar que soy feliz, que no echo de menos dormir para soñar pues aquí me tienes soñando despierto. Hoy, simplemente sé que día es.