lunes, 23 de mayo de 2011

ESPERANZAS REALES

Me he permitido rescatar unos fragmentos de entre las entrañas de un antiguo texto que, en grandes dosis, evidencian el tránsito que circula estos días por mi cabeza. En días de contrastes, marcados por las miles de protestas en la calle repletas de esperanzas e ilusiones y los resultados tan dramáticos (en algunos casos, realmente lamentables) que las urnas nos han deparado, me apetecía volver a exponer ciertos puntos de vistas sobre determinadas cuestiones. Comienza  así:

Una tremenda pesadez descansa sobre mis ojos. Es demasiada la angustia y la fatiga acumulada. El valor vacila víctima del propio agotamiento. Sucumbir significaría la rendición. Sucumbir significaría la muerte. Me encuentro abatido pero no hundido. Espero mi momento, será entonces cuando las campanas suenen anunciado la llegada de una nueva era. Una era de cambios, una nueva era de revolución. La revolución de las ideas volverá a nuestros hogares, descansará junto a nuestra almohada. No tratéis de impedírmelo, pues ando decidido de hacerlo. Únicamente el cambio nos salvará de este destino oscuro que al final a todos nos estará esperando.

Un hombre por si solo no moverá el mundo pero si pondrá la primera piedra para que el mundo nunca deje de girar buscando desesperado el movimiento exacto que le permita saber que solo allí estaremos a salvo. La conciencia mundana es más visible de lo que se le presupone. Atiende al concepto de salvación única el hecho de buscar la salvación eterna, aquí en la tierra como en el cielo. Quizás ese intento de ponernos a salvo debiera partir de miradas autocríticas, constructivas y progresistas. La salvación única al igual que el pensamiento único debería formar parte del ranking de cosas por abolir de este mundo.

Las personas planteamos en función de lo que demandamos. Demandamos en consonancia de lo que necesitamos. Necesitamos lo que se presupone necesario. ¿Quién dice que es necesario? Sabemos cuales son las verdades necesarias para seguir formando parte de todo esto. Aun así mostramos nuestro empeño más testarudo en implicarnos en demandar necesidades estériles y vanidosas. Comprobar que el orden es perfecto solventa la incesante desazón en el que nuestra capa más profunda descansa. Nunca en paz, eso se les supone a los que deciden abandonar y dejarnos de lado. Es posible que en otro paraíso se esté mejor, nadie nos asegura que no lo sea. Tienes 2 opciones: Quedarte y luchar con lo que te toque en suerte vivir o largarte y disfrutar de una entrada de incertidumbre que no sabes donde te conducirá.

El castigo de estar presente nos viene dado en dosis perfectas. Especular con el hipotético resultado desmerece el efecto resultante. Si incluso en esos momentos la acidez derivada por una angustia incontrolable no te permitiera regodearte en los planteamientos obtenidos te invitaría a marcharte y apoyaría que nos abandonara. Encontraré las palabras perfectas para despedirte. Se te rendirá el deseado tributo a los postres.

La aritmética emocional adecuada nos servirá de balsa de aceite para hacerte cruzar al otro lado. Nada de inventos diezmados ni de sujetos a caballo. En un arco perfecto dibujaremos la ruta metafórica. Sirva para recolocar todos los puntos sobre las ies. Dejad que existan cosas que se escapen del control autoritarista preestablecido. No se puede reconducir a la persona con medidas de hierro. El hierro metaliza lo humano, resta de sensibilidad a las emociones, las vuelve herméticas y miserables. Si el metal sustituye los sentidos retornaremos a la edad metálica. Si es allá hacia donde tus pasos te llevan disculpa que me baje pero mis huellas se verán dirigidas en el otro sentido. Mi apuesta es clara. Sentido gana al metal. Ideas doblega a la manada. Revolución vence a pasivismo.
Si tu lucha es la mía, coge mi mano y camina conmigo. Si tu lucha es distinta te deseo las mejores de la suerte. Al final todos buscamos el final del camino en el que poder al fin descansar plácido y sentarnos a ver pasar lo logrado a lo largo de la senda ya caminada. Sólo ahí podré cerrar los ojos y con la calma otorgada de mi corazón podré al fin………… descansar tranquilo.

4 comentarios:

  1. Preciosas palabras para un sueño cada dia mas cercano.
    Saludos ;)

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  2. Pocas veces me atrevo a escuchar esa música. Hoy me sirvió mucho hacerlo mientras leía tu post.
    Gracias por tus comentarios.

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  3. Pues mis apuestas son similares a las tuyas. Sólo que yo no sé si podré descansar tranquila mucho tiempo, siempre habrá cosas que puedan mejorarse y tengo la certeza de que que he venido aquí a dejar las cosas mejor de como las he encontrado. Es una deuda. Es una deuda de todos y en mi caso además es una deuda personal.
    Después de una lucha, vienen otras. Y en la vida hay generalmente tiempo para todo: para reir, para descansar, para ser feliz, para disfrutar, para luchar, para ayudar...quien quiera sólo posarse en una de esas ramas allá él, yo sé lo que tengo que hacer.
    Y esta tarde mi bici y yo iremos de nuevo a sol ;).
    Un besazo rey,te cojo la mano y camino contigo.
    Muaa

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  4. Visitandote de nuevo y es que es un placer leerte y no dudes que algunos de tus parrafos me los lleve prestados en algun momento.

    "Un hombre por si solo no moverá el mundo pero si pondrá la primera piedra para que el mundo nunca deje de girar"
    "El hierro metaliza lo humano"

    La musica excelente!

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