viernes, 5 de agosto de 2011

ESTADOS CICLICOS

Ahora sentados entre las ruinas de un viejo lugar herido por el abandono humano y gastado por la erosión del mar, los cuerpos bautizan las almas. Aparece el silencio, desaparece el murmullo. Ahora desnudos los cuerpos, los estanques no dejan de ser dorados, brillan en la oscuridad como faros en la noche.
Encendidas las estancias apagan los candiles, la cera derretida transforma las esencias en halos luminosos dando paso a un escenario de rostros vírgenes y frágiles, indefensos a la mirada próxima y seguros en la certeza de quienes les miran.
Como niños atrapados dentro del laberinto corren por su interior despreocupados por la salida, nuevos brotes germinan enredados entre las vides floreales, horizontes cambiantes recuperan los orígenes; mientras, ajenos a todo no sospechan que a escasos metros de su particular universo un observador abúlico no deja de prestarles toda su atención, al verlos recuerda que aún no es hora de echar abajo el telón.

5 comentarios:

  1. Me gusta el lenguaje de los silencios; pero resulta inquietante el final de este post...ese observador que decide si la vida continua o si ya es hora de acabar...algo así como el científico mirando por su microscopio otros mundos, otras sociedades..

    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Siempre hay alguien observando, quizá las cosas se vean mejor desde fuera mientras dentro nos distraemos.
    Un placer volver a leerte, siempre esperando tus entradas...
    Saludos ;)

    ResponderEliminar
  3. Me gustaría saber si tienes cuenta de face.
    Estoy más activa por la página, y os sigo mucho mejor desde ahí!!
    Un abrazo, Daniel!

    ResponderEliminar
  4. Hola Dani, dejas otra entrada intrigante para mi, ojala que ese observador no decida por los demás y solo lo haga por el mismo, disfruta de la vida Dani.
    Un besote bien fuerte!!

    ResponderEliminar
  5. Los cuerpos bautizan las almas; acaban de nacer.
    Quizás desnudos, vírgenes y despreocupados el paraíso sea un lugar con más luz y más vistas.
    A mi la fragilidad me hace mucho más fuerte.
    Y en el laberinto, siempre es mejor perderse.
    De todas formas, todos hemos sido algo abúlicos alguna vez hasta que hemos mirado la muñeca y hemos visto como se pasa el tiempo como para serlo.
    Besotes, este texto tiene "tela", y cada frase es "comentable".
    Más besos rey

    ResponderEliminar